ME SIENTO SOLO
- Estefanía
- 23 mar 2018
- 2 Min. de lectura
La soledad es un monstruo horrible al que todos hemos tenido que ver en en algún momento de nuestras vidas. Recuerdo hace como tres años salir de clases y caminar hacia el centro de la ciudad sintiendo una gran tristeza y soledad como si nadie pudiera sacarme de ahí, fué una época difícil, pero ahora mirando hacia atrás comprendí que todo era un plan de Dios de bien para mi vida.
"No es bueno que el hombre esté solo" dijo Dios cuando creó a Eva para Adán, así es que no es el plan de Dios que permanezcas así.
Dios conoce tu corazón y sabe que es lo que necesitas, aún cuando tu piensas que necesitas una cosa el Señor sabe que necesitas otra, seguramente quieres amigos, una pareja, familia o compañeros de trabajo y eso no está nada mal porque, la vida no se completa estando solo como muchos hablan hoy en día, sin embargo en los momentos de soledad puedes aprender mucho si vas de la mano de Dios.
Cuando decidí emprender sola mi camino, después de muchos años yendo con mi mejor amigo, me enfrenté a muchas dificultades mentales y emocionales, pero conforme pasaba el tiempo aprendía que la mejor compañía es la presencia de Dios, si Él caminaba conmigo nada podía abrumarme pues mi confianza estaba en la paz y en la promesa que Él me daba y, no estaba equivocada pues a partir de esa decisión comencé a vivir una vida más real en Cristo a pesar de muchos tropiezos, y una vida más plena para mi misma; aprendí a amarme porque sabía que si Dios me amaba no importaba que tan sola me dejara la gente quien quiera que fuera, incluso mi familia, siempre podría confiar en que Dios jamás me dejaría desamparada (Salmos 27:10).
A veces Dios promueve la soledad en nuestras vidas para depender totalmente de Él y cuando lo logras es lo más maravilloso pues sabes que aunque la tormenta sea dura y helada tu permanecerás de pie.
Pero también hay soledad que el mismo hombre se busca porque aleja a las personas que lo aman y, en esa circunstancia Dios no te ayudará hasta que tu lo quieras así, pues aunque él te ha buscado primero antes que tu a Él (1 Juan 4:19), Dios no acude a donde no lo han llamado, en cambio está con los que están tristes y en su soledad le buscan (Salmos 34:18).
Dios es el gran estabilizador de las crisis y nos da su plan de vida, su familia y su presencia para poder resistir, si hoy no lo oyes ni sientes su presencia probablemente no te estás conectando lo suficiente con Él, pero aunque el Señor permanezca callado, Él siempre estará sosteniéndote para que no caigas.
Si hoy te sientes solo en un desierto recuerda que Jesús comenzó su ministerio en un desierto. Cultiva tu relación con Dios, ora, lee la biblia y Él va a quitar los pensamientos auto destructivos que hay en ti. En ningún otro lugar estarás más completo que sólo en Cristo y Él entonces te mostrará una vez más su amor poniendo en tu camino a las personas adecuadas desechando con su Espíritu a la soledad.
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